Popayán, 17 de junio de 2020 (@URestitucion). En el departamento del Cauca la Unidad de Restitución de Tierras (URT) continúa trabajando para garantizar el restablecimiento de los derechos sobre la tierra de las víctimas de la violencia. En el marco de este trabajo, enfocado en una gestión eficiente para quienes reclaman los predios, la entidad ha logrado que en el departamento de Cauca los jueces, luego de revisar los casos, fallen 14 sentencias a favor de familias que tuvieron que enfrentarse a la violencia.

Varias personas de los municipios de Cajibío, Buenos Aires, Tambo, entre otros, huyeron al ser víctimas de instigaciones que incluían la posibilidad de que sus hijos fueran reclutados, el asesinato de sus cónyuges y familiares, amenazas de muerte, trabajos forzados y todo tipo de situaciones resultado de la presencia de Autodefensas y guerrilla en diferentes municipios del departamento.

Tal es el caso de Pedro Suarez*, un ex militar que en 1994 decidió dejar el ejército y regresar al campo. El predio en el que vivía se lo compró a su mamá y con mucho trabajo logró construir una casa, mantener sus cultivos de café y maíz y tener algunos cerdos para cría. Sin embargo, su vida cambió en el 2005 cuando las FARC iniciaron operaciones para ganar control de la zona rural del Tambo, y empezaron a amenazarle, exigiéndole que se enlistara en las filas del grupo armado para evitar perder su propiedad. Pedro* se negó y empezó su historia de desplazamiento que lo llevó a Popayán y luego a Ibagué.

La presencia de estos grupos armados ha dejado una huella dolorosa en todo el departamento que ha llevado a desplazamientos y abandonos forzosos de predios. No obstante, la existencia de políticas como la restitución de tierras ha traído a todas estas víctimas la esperanza de regresar a sus tierras o, en algunos casos, acceder al beneficio de compensación que les permite adquirir un predio en similares condiciones al que tuvieron que dejar, en otras zonas del país.

Como Pedro y su familia, hoy 14 familias del Cauca tienen un nuevo comienzo. Entre los beneficiarios de las sentencias se encuentra una familia de Cajibío, que fue víctima de las FARC, puntualmente del conocido “Negro Acasio”, quien sometió a todos los miembros de la familia a trabajos forzosos, situación que llevó al desplazamiento.

En este grupo de sentencias 8 casos, de 14, fueron beneficiados con una orden de restitución, mientras que las 6 familias restantes se les ordenó la compensación por equivalencia o económica, dependiendo de cada caso. Además de tener sentencias favorables en lo que tiene que ver con los predios, las víctimas contarán con medidas de alivio de pasivos que tengan los predios, por concepto de impuesto predial, priorización para subsidios de vivienda y la implementación de un proyecto productivo que pueden contarse entre las órdenes que favorecen a estas víctimas.

La Unidad de Restitución de Tierras para el Cauca continúa recibiendo solicitudes y dándoles trámite, con el propósito de garantizar una reparación integral a las víctimas a través del acceso a los mecanismos de atención, la eficiencia en los procesos y el acompañamiento constante a quienes reclaman sus tierras, todo esto para que con la restitución se puedan transformar vidas.

Para la directora territorial del Cauca, María del Mar Chaves Chavarro, “el trabajo previo a una sentencia a favor de las víctimas está lleno de desafíos que los solicitantes, colaboradores y funcionarios de la Unidad, así como los Jueces de Restitución de Tierras, deben sortear y que son incluso más complejos en un departamento como el Cauca, por los conflictos sociales, económicos y de orden público. Estas sentencias no solo son un mensaje de esperanza, sino 14 ejemplos más de que es posible construir paz con legalidad. Vivimos un momento de histórica dificultad, de incertidumbre y de temor. En Cauca hay factores que agudizan todavía más la crítica situación y por eso la URT mantiene su compromiso de acompañar a las víctimas de regreso a sus tierras y recuperar la esperanza.”

Nombres cambiados*.